Para trabajar con herramientas de perforación manuales de manera profesional, hay que tener en cuenta algunos factores importantes, e incluso decisivos, para obtener un mejor resultado.
Factores decisivos: fuerza de empuje, velocidad de corte y velocidad
Un ser humano normal es incapaz de ejercer las fuerzas de empuje empleadas, por ejemplo, en una herramienta de perforación de columnas, a menos que se usen brocas pequeñas. En el caso de la perforación manual, por tanto, es necesario reducir la fuerza de empuje necesaria seleccionando la broca correcta y aplicando una técnica de perforación. La velocidad de los bordes de corte al penetrar el material se denomina "velocidad de corte", que es cero en el centro del orificio y mayor en la periferia, donde también se mide. Se especifica en metros por minuto (m/min). Los distintos tipos de materiales requieren distintas fuerzas de corte.
La velocidad en vacío de una herramienta de perforación se especifica en el número de revoluciones por minuto (rpm) y se indica en la placa de datos de la herramienta.
La broca de perforación
Hay que tener en cuenta tres puntos relacionados con la broca de perforación: el material, el tratamiento superficial y el tipo. El acero de alta velocidad es el material más usado en la fabricación de brocas. Las brocas de carburo cementado son esenciales para materiales altamente abrasivos, como compuestos con refuerzo de fibra de vidrio, fibra de carbono o fibra Kevlar, para garantizar que se puedan usar durante un periodo de tiempo razonable entre afilados. Por otro lado, las brocas templadas al vapor tienen menos fricción gracias a una superficie más suave, por lo que el material perforado no se atasca tan fácilmente y también queda protegido frente a la corrosión.
Hay tres tipos de perforadoras en función del método que utilizan: perforadora corriente, perforadora de espiral rápida y perforadora de espiral lenta. Lo que cambia es el ángulo y el material para el que están recomendadas.
La herramienta de perforación
En lo que respecta a las operaciones de perforación manual, se necesita velocidad y precisión. Las máquinas también deben ser ligeras y resistentes para evitar el cansancio del operador. Las perforadoras neumáticas son compactas y ligeras, por lo que son fáciles de sostener y se adaptan a la mano y a la anatomía del brazo. Básicamente hay cuatro tipos diferentes de perforadoras: taladros de pistola, taladros rectos, taladros angulares y taladros con tornillo de avance. Todos estos tipos de perforadora son adecuados para el entorno de trabajo y su elección afecta directamente a la ergonomía del operador. En las operaciones de perforación manual son frecuentes las posturas de trabajo incorrectas, pero es un problema que suele poder evitarse empleando el tipo de herramienta correcta.
Estos son algunos ejemplos:
Al perforar en una posición alta, use un taladro recto
Al perforar en una posición baja, use un taladro de pistola