Guía de dimensionamiento de compresores

Determinar el tamaño correcto de un compresor de aire implica algunos pasos esenciales:

• Conocer sus herramientas y sus necesidades: haga una lista de todas las herramientas y equipos que utilizarán el compresor de aire. Compruebe los requisitos de caudal y presión de cada herramienta.
• Tener en cuenta el ciclo de trabajo: evalúe la frecuencia y el tiempo de uso de cada herramienta. Aquellas que funcionen de manera continuada necesitarán un compresor que pueda soportar ciclos de trabajo más prolongados.
• Pensar en ampliaciones futuras: plantéese cualquier herramienta potencial o incremento de uso futuros. Es aconsejable elegir un compresor que sea capaz de lidiar con más de lo que necesita en ese momento correspondiente para evitar que se quede pequeño en poco tiempo.

Para elegir el compresor adecuado deben tenerse en consideración varios criterios:

• El caudal de aire: calcule cuánto caudal de aire (pies cúbicos por minuto u otras unidades) se necesita para sus aplicaciones. Se trata de una cuestión esencial, ya que indica el volumen de aire que puede suministrar el compresor. Las distintas herramientas neumáticas necesitan distintos caudales, por lo que conocer sus necesidades concretas es esencial.
• La presión: averigüe la presión necesaria (libras por pulgada cuadrada) para sus herramientas y maquinaria. Para distintos usos se necesitarán presiones diferentes.
• El uso: tenga en mente los usos específicos y los requisitos de calidad del aire. Piense asimismo en cualquier pérdida de presión que se produzca como consecuencia de la presencia de secadores, filtros o purgadores, incluido el evaluar si necesita un compresor de alta presión o uno para pintar por pulverización u otras tareas concretas.
• Potencia: aun siendo importante, la potencia no es el criterio principal de selección. Céntrese primero en el caudal de aire y la presión y seguidamente adapte la potencia (CV) o los kilovatios (kW) del compresor a sus necesidades.

A la hora de dimensionar un compresor de aire, es esencial conocer la diferencia entre capacidad y caudal.

• La capacidad del compresor de aire hace referencia al volumen total de aire que puede contener el compresor.
• El caudal del compresor de aire mide la rapidez con la que el compresor puede suministrar aire.

Estos dos valores son esenciales para garantizar que su compresor pueda responder a las demandas de sus herramientas y usos.

Un método para conocer el caudal total consiste en pedir las fichas técnicas a los fabricantes de los equipos. No obstante, la forma más exacta consiste en llevar a cabo una "auditoría de aire comprimido" por parte de un profesional de las ventas del sector.

El caudal de aire, también conocido como aire libre suministrado (FAD), se mide en pies cúbicos por minuto (CFM), litros por segundo (l/s) o metros cúbicos por hora (m³/h), según dónde se encuentre el cliente. En pocas palabras, el caudal de aire determina la eficacia con la que un compresor puede realizar una tarea en un plazo de tiempo admisible. El caudal necesario depende del tiempo preciso para llevar a cabo una tarea.

Para dimensionar con precisión su compresor para aplicaciones nuevas o ya existentes, comuníquese siempre con un profesional de aire comprimido para efectuar una auditoría.

Conocer los requisitos de caudal y presión para su instalación es clave a la hora de elegir un compresor de aire. La presión y el caudal son términos que se utilizan con mucha frecuencia al hablar de sistemas de aire comprimido.

La presión se puede medir en libras por pulgada cuadrada (PSI) o en bares (unidades métricas). En pocas palabras, la presión se refiere a la cantidad de fuerza necesaria para realizar una determinada cantidad de trabajo en un momento dado.

El compresor de aire debe generar suficiente presión como para llevar a cabo una tarea determinada. Si se necesitan 115 PSI para mover el bloque, ningún valor inferior a este logrará que lo haga. Es importante conocer la presión necesaria para elegir el tamaño idóneo de un compresor. De lo contrario, puede enfrentarse a problemas similares a los de la ilustración, en los que una presión más baja no consigue mover el bloque de madera o realizar el trabajo.

A la hora de elegir el compresor adecuado, tenga en cuenta tanto la cantidad de aire comprimido (CFM) necesaria como la presión específica (PSI) requerida para el proceso. Las diferentes herramientas y aplicaciones exigen valores concretos de CFM y PSI.

A continuación aparece un gráfico con las herramientas habituales y lo que necesitan:

• La calidad del aire: en función de la correspondiente finalidad, es posible que necesite compresores exentos de aceite o lubricados con aceite.
• La eficiencia energética: plantéese adquirir compresores con clases de eficiencia energética validadas para ahorrar en costes operativos.
• La capacidad de transporte: determine si necesita un compresor estacionario o portátil en función de sus necesidades de espacio de trabajo y movilidad.
• Los niveles sonoros: algunos compresores emiten menos ruido que otros, lo que puede ser cuestión esencial en entornos donde el ruido sea cuestión relevante.

Puede encontrar más información en el libro electrónico "Guía de selección del compresor óptimo" o comuníquese con nosotros para obtener ayuda personalizada. Nuestros expertos están a su disposición para ayudarle a escoger el mejor compresor para sus operaciones.

Una calculadora de conversión de volumen puede ayudar a dimensionar el compresor de aire con exactitud. Facilita la tarea de convertir diferentes unidades de medida para comprobar que el compresor satisfaga sus necesidades específicas. Esta herramienta puede facilitar el proceso de elección de potencia correcta.