¿Cómo las bajas temperaturas afectan un compresor?
Un claro ejemplo es el condensado que se congela y obstruye o agrieta los componentes críticos del sistema. Las tuberías, las válvulas de drenaje, los filtros de aire comprimido y los intercambiadores de calor, se pueden dañar seriamente en la época invernal también. Otros problemas potenciales que se presentan:
- El compresor se niega a arrancar: ¿tiene un compresor a tornillo que se niega a arrancar en frío? Esto se debe, probablemente, a que el interruptor evita los arranques cuando la temperatura de trabajo del compresor es muy baja.
- El aceite del equipo se vuelve más espeso: ¡cuanto más frías sean las temperaturas, más espeso será el aceite! A medida que el aceite se espesa, la lubricación disminuye, lo que significa que se requiere más potencia para impulsar el compresor. ¡Importante! La vida útil del motor puede reducirse si esto continúa durante mucho tiempo.
- El secador frigorífico forma tapones de hielo en el sistema: cuando el aire comprimido se enfría por la baja temperatura ambiente, existe el riesgo de que la condensación se congele en el sistema y forme un tapón de hielo que impida que el aire se transporte más adentro del sistema. .
- El secador de adsorción no funciona correctamente: el aire húmedo entrante puede congelarse dentro de las tuberías del secador, lo que hace que las válvulas de cambio de la torre dejen de funcionar. También podría congelarse la válvula de purga lo que afectaría este proceso.
- Los componentes se oxidan: debido a que la eficiencia de muchos secadores de aire comprimido es menor cuanto más frías sean las temperaturas, el riesgo de condensación en el sistema aumenta. En un sistema de aire comprimido húmedo, se incrementa también el riesgo de corrosión de los componentes internos y las tuberías.
Consejos para tener un óptimo compresor de aire en el invierno
No descuide el mantenimiento
Identifique y resuelva las fugas de aire: aún la fuga más pequeña del sistema de aire comprimido puede ser una gran pérdida de recursos. Si identifica y repara las fugas actuales aumentará la eficiencia de su sistema a largo plazo.
Compruebe si hay filtros obstruidos: si el aire comprimido no se filtra adecuadamente, o el filtro está obstruido, las caídas de presión son más frecuentes y el riesgo de contaminación del producto final aumenta.
🧑🏻🔧Sugerencia: es probable que en un control regular del sistema no se evalúen las señales que podrían indicar un problema potencial. La supervisión avanzada de datos o el monitoreo remoto de equipos es una de las estrategias más eficaces para mejorar la eficiencia del sistema de aire comprimido, y evitar costosos tiempos muertos.
Climatice su sistema y su sala
Asegúrese que haya una protección adecuada contra la lluvia, y en casos extremos, la nieve.
Marque en su calendario la realización de la climatización bianual: se recomienda hacerla a finales del otoño y de la primavera.
🧑🏻🔧Sugerencia: si climatizar su sistema de aire comprimido dos veces por año no le resulta motivador per se, considere invertir en un plan de mantenimiento continuo. Las instalaciones bien mantenidas son a menudo las más eficientes en términos de consumo y aprovechamiento energético, y sufren menos tiempo de inactividad que aquellas en las no se prioriza el mantenimiento.
¿Pensó en invertir en un sistema de recuperación de energía?
En condiciones óptimas se puede recuperar hasta el 94% del calor producido en el proceso de compresión del aire. Con un equipo de recuperación de energía puede evitar el costo de producir agua caliente para los baños y la limpieza del equipo, o los costos de dirigir el aire caliente a un espacio de trabajo, almacén, etc.
Busque establecer potenciales ahorros en el consumo de servicios públicos (electricidad, gas) para compensar la inversión en nuevos y más eficientes equipos de aire comprimido capaces de recuperar y aprovechar el calor irradiado.