Ya sea que esté trabajando en una fábrica, laboratorio, imprenta, línea de embalaje, modelado de plásticos o cualquier otro entorno industrial, el aire comprimido que utiliza debe ser confiable.
Esto no sólo significa que funcionen sus compresores o que la red no tenga pérdidas. El aire comprimido debe estar a la temperatura adecuada, con niveles aceptables de vapores, aerosoles y partículas en suspensión y, además, a la presión correcta para la aplicación a la que se lo destine.
Los sensores de presión mantienen su equipo a salvo
Mediante la utilización de filtros de aire comprimido y secadores puede garantirse que el aire sea seguro, tanto para máquinas como para los productos en proceso.
Pero el aire comprimido, en su camino al punto de uso, pierde presión cada vez que pasa por estos elementos de tratamiento de aire. La solución es instalar un sensor de presión a la salida de los mismos para monitorear y controlar la presión a cada momento.
La reducción de la presión puede ahorrarle dinero
Un sensor de presión y un controlador inteligente, tal como el sistema Elektronikon ® de Atlas Copco –que mide diversos parámetros del compresor y del secador- pueden garantizar una presión determinada, reduciendo la banda de presión de trabajo del compresor y adaptándola a la demanda variable de aire comprimido.
Esto puede significar grandes ahorros. La reducción de la presión en 1,4 bar puede bajar el consumo de energía en un 10% y las fugas en aproximadamente un 19%.
En promedio, la mayoría de las instalaciones que utilizan aire comprimido experimentan una pérdida de aire comprimido del 25% al 30% debido a fugas de aire.
Asumiendo que el costo de la electricidad fuera en promedio U$S 0,07 / kW / hora, un compresor de aire de 100 HP que funcione durante un año, podría costar aproximadamente U$S 48.000.
Bajar ese valor en un 30% es como dejar de gastar U$S 14.400 de su cuenta bancaria.
No dude en contactar a nuestros expertos hoy mismo para evaluar cómo un sensor de presión y un controlador inteligente pueden ayudarle a aumentar su rentabilidad y eficiencia ahorrando energía y dinero en su planta.