El costo real de un compresor
Todo el mundo ha experimentado el típico "susto al ver el precio". Esa sensación de ver el precio de un artículo y pensar que es muy alto. Sin embargo, en muchos productos, el precio que figura en la etiqueta es tan solo una pequeña parte de su coste total. Por eso es fundamental tener en cuenta el coste total de propiedad (TCO), es decir, el coste real que supone comprar, mantener, accionar y, a la larga, reciclar un compresor de aire.
¿Cuánto cuesta un compresor de aire?
Los compresores son un excelente ejemplo de la gran diferencia que puede haber entre la inversión inicial y el coste total de propiedad. El precio de compra de un compresor de aire industrial representa solo el 20 % de su coste durante su ciclo de vida. La mayor parte de ese coste, aproximadamente el 80 % del coste total de propiedad, puede atribuirse a los gastos energéticos y el resto al mantenimiento.
Esto significa que lo peor que se puede hacer al comprar un compresor es mirar solo su precio de compra sin tener en cuenta los costes posteriores. Normalmente, los compresores más baratos no suelen ser muy eficaces en términos energéticos, lo que significa que terminan saliendo más caros. Solo son una buena opción en los pocos casos en los que el compresor solo se utiliza ocasionalmente.
Todo el mundo ha experimentado el típico "susto al ver el precio". Esa sensación de ver el precio de un artículo y pensar que es muy alto. Sin embargo, en muchos productos, el precio que figura en la etiqueta es tan solo una pequeña parte de su costo total. Por eso es fundamental tener en cuenta el costo total de propiedad (TCO por sus siglas en inglés), es decir, el costo real que supone comprar, mantener, accionar y, a la larga, reciclar un compresor de aire.
Los compresores son un ejemplo representativo de lo pronunciada que puede ser la diferencia entre la inversión inicial y el costo total de propiedad. El precio de compra de un compresor de aire industrial representa solo el 20% de su costo durante su ciclo de vida. La mayoría de ese costo, aproximadamente el 80% del TCO, puede atribuirse a gastos energéticos y el resto al mantenimiento.
Esto significa que lo peor que se puede hacer al comprar un compresor es mirar solo su precio de compra sin tener en cuenta los costos posteriores. Normalmente, los compresores más baratos no suelen ser muy eficaces en términos energéticos, lo que significa que terminan saliendo más caros. Solo son una buena opción en los pocos casos en los que el compresor solo se utiliza ocasionalmente.
Reducción de los costos operativos del compresor
En la mayoría de los demás casos, la mejor forma de ahorrar dinero con el tiempo es limitar los costos operativos del compresor. Puesto que constituyen un porcentaje tan alto del costo total de propiedad, el punto de partida más lógico es reducir los gastos energéticos. Esto se puede lograr de forma sencilla y eficaz mediante la compra de un compresor libre de aceite o con inyección de aceite de bajo consumo.
Nuestro compresor VSD+ con accionamiento de velocidad variable puede reducir el consumo de energía hasta un 50%, lo cual supone un ahorro de mucho dinero durante muchos años. El enorme ahorro energético permite a los operadores recuperar rápidamente todos los costos de la inversión, normalmente en el plazo de un año.
Muchos países ofrecen beneficios fiscales u otros incentivos por cambiar a compresores que ayuden a preservar la energía.
Además de su eficacia y del ahorro que aportan, los compresores de alta calidad tienen otras ventajas. Su fiabilidad puede reducir los costos operativos del compresor ampliando la vida útil de la máquina y los intervalos de mantenimiento. Un compresor fiable puede evitar costosos tiempos de inactividad y el aire de alta calidad que produce puede proteger los equipos en los que se utiliza.
Muchos de estos beneficios no son solo de tipo económico. La reducción del consumo de energía también contribuye a un entorno más ecológico y a reducir la eliminación de residuos mediante compresores y otros equipos que duran más.
Los costos operativos ocultos del compresor
Además de los ahorros obvios que puede generar un compresor de gama alta, también hay que tener en cuenta los “costos indirectos”. Algunos ejemplos son:
- Un compresor compacto libera espacio en las instalaciones de producción.
- Un compresor silencioso es más atractivo para los empleados y reduce la necesidad de comprar protectores auditivos
- Un compresor que genera pocas emisiones es beneficioso para la salud de los empleados.
Por todas estas razones, conviene investigar no solo el precio de los compresores, sino también los costos operativos asociados a ellos. Y si tiene alguna duda sobre cómo calcular el costo total de propiedad, nuestros expertos estarán encantados de aconsejarle.