Descargue la guía de 10 pasos para una sala de compresores de bajo consumo
Esta guía sobre la reducción de carbono en la producción tiene como objetivo aumentar la concienciación sobre los ahorros potenciales en la generación, el tratamiento y la distribución de aire comprimido.
Breve resumen de la guía
Estas 10 medidas le ahorrarán dinero a largo plazo, y algunas de ellas cuestan muy poco ponerlas en práctica. De hecho, cuando termine de leer esta guía podrá tomar medidas significativas de inmediato para que su producción sea más ecológica y eficiente.
1. Aplicación e instalación
Antes de ampliar, sustituir o mejorar un sistema de aire comprimido existente, primero hay que intentar eliminar los residuos del sistema actual. Un error común es basar la selección de nuevos equipos en el tamaño del hardware existente y luego simplemente ampliarlo para tener en cuenta el crecimiento previsto.
2. Almacenamiento y distribución
El tamaño del depósito de aire y de las tuberías de una aplicación puede influir directamente en el consumo de energía. A medida que crecen las operaciones, las empresas se limitan a ampliar las tuberías para satisfacer las necesidades de los nuevos equipos. Sin embargo, las empresas deberían revisar el diseño de sus tuberías de aire comprimido.
3. Calidad del aire
El aire limpio tiene su coste, tanto en términos de energía como de dinero. Por eso debe saber siempre qué pureza de aire requiere su aplicación. Si purifica demasiado el aire, malgastará energía y perjudicará innecesariamente al medio ambiente; si purifica demasiado poco, puede poner en peligro su producción.
4. Volumen y flujo
Si conoce mejor su demanda de aire, podrá ahorrar una cantidad sustancial de dinero la próxima vez que invierta en un compresor. Si elimina las ineficiencias de su red de aire comprimido, es posible que su próximo compresor tenga que ser mucho más pequeño de lo que piensa, o que ni siquiera necesite uno nuevo todavía.