Sistemas de transporte de material plástico
El plástico es uno de los materiales más importantes del mundo y, por tanto, también uno de los más transportados.
Diariamente, hay que transportar grandes cantidades de plástico hacia y desde las instalaciones de producción y procesamiento, así como dentro de ellas. Aunque existen diferentes métodos para hacerlo, el transporte neumático ha demostrado ser la tecnología más eficaz y eficiente para transportar materiales a granel como el plástico.
Análisis del dimensionado de un sistema de transporte neumático de plástico
El transporte neumático utiliza aire comprimido para mover grandes volúmenes de materiales a través de tuberías o mangueras de un punto a otro. Es una forma extremadamente eficiente de abarcar distancias de unos pocos a cientos de metros.
Aunque la definición de transporte neumático es bastante sencilla, encontrar el sistema de transporte óptimo para el plástico (y dimensionarlo adecuadamente) es un poco más complejo. Esto es especialmente importante en el caso de los plásticos, ya que los gránulos que hay que transportar presentan diversos tamaños dependiendo de la aplicación, lo que significa que también precisan de caudales y presiones de aire comprimido diferentes para moverlos de manera eficiente. Por tanto, para lograr entender lo que se debe hacer para encontrar la solución ideal, será conveniente examinar más de cerca las diferentes opciones.
Encontrar el sistema de transporte de material plástico adecuado
En primer lugar, hay dos tipos de transporte neumático: el de presión (positivo) y el de vacío (negativo). En el primero, se utiliza aire comprimido al principio del sistema para empujar el material a través de las tuberías. En el segundo, es "aspirado" hacia su destino.
Aunque solo uno de ellos es adecuado para algunos materiales, el plástico puede transportarse utilizando tanto el transporte a presión negativa como el transporte a presión positiva. Depende del tipo de plástico que haya que transportar y de los requisitos del sistema para elegir la solución ideal.
Además de determinar el tipo de transporte neumático que desea utilizar, también tiene que elegir o conocer la fase adecuada. En este caso, quiere decir que empleará la fase diluida y la fase densa.
Soplantes de aire y compresores para transporte de plástico
Una vez que sepa en qué fase va a transportar el material, tiene que dimensionar adecuadamente el sistema, lo que se traduce en encontrar el caudal y la presión ideales para el transporte. Incluso si quiere sustituir un sistema de aire comprimido existente, le será útil analizar el tamaño. Un estudio del tamaño correcto le ayudará a reducir sus gastos de energía y a garantizar un funcionamiento sin problemas. Si ha optado por la fase diluida, le resultará muy útil comprobar el correcto dimensionamiento del sistema y evitar que seleccione un soplante o un compresor de tamaño incorrecto.
Refrigeradores posteriores
El plástico es sensible al calor. Por nuestra experiencia diaria, sabemos que puede ablandarse o incluso deformarse si se expone a altas temperaturas. Por eso, además de un compresor o soplante, necesitará un refrigerador posterior para garantizar que la temperatura del aire sea inferior a 70 °C-90 °C (en función de la aplicación).
Algunos compresores disponen de un refrigerador posterior integrado, mientras que otros no. En ese caso (y si utiliza un soplante), el refrigerador posterior tendrá que instalarse por separado. También puede ser necesario añadir un enfriador si decide instalar un refrigerador posterior refrigerado por agua. El enfriador reduce la temperatura del agua a un nivel manejable y constante, lo que garantiza que el refrigerador posterior pueda hacer su trabajo.
Separador de agua o secador
El proceso de refrigeración con un refrigerador posterior crea humedad. Por lo tanto, para proteger el plástico, también se requiere un separador de agua o un secador. Generalmente, los refrigeradores posteriores integrados incorporan un separador de agua. En algunos casos específicos, se puede utilizar un secador en lugar de un separador de agua para eliminar la humedad del aire.
El papel de la fluidización para los plásticos
El aire comprimido también puede utilizarse para el llamado proceso de "fluidización". Cuando se transporta material plástico, se inyecta aire a muy baja presión en el sistema para garantizar que el plástico no se pegue a las paredes del contenedor que lo almacena. Además, la fluidización facilita el transporte, lo que reduce los costes de energía. Aunque la fluidización es un tipo de transporte neumático, no suele requerir equipos adicionales como enfriadores posteriores. La presión de aire necesaria para la fluidización del plástico es muy baja, de manera que hay menos calor creado por el soplante o el compresor durante el proceso de compresión. El resultado es una temperatura del aire más baja.
¿Necesita ayuda para optimizar su sistema de transporte de plásticos?
¿No está seguro de cómo sustituir su antiguo sistema de aire comprimido por uno nuevo? Déjenos ayudarle. El dimensionado correcto de la instalación es crucial: no solo le ayuda a ahorrar en costes de energía, sino que también acorta los tiempos de descarga y le ayuda a evitar obstrucciones. Calcular el tamaño adecuado de su instalación es difícil y requiere programas informáticos y conocimientos específicos. Podemos ayudarle a encontrar el sistema óptimo de transporte neumático de polvo en fase diluida ofreciéndole una estimación del tamaño gratuito.