9 de abril de 2024
¿Sabía que la presión es uno de los principales factores que determinan la capacidad y la potencia de un sistema de aire comprimido? Esto significa que es esencial conocer los requisitos de presión de la instalación, proceso y/o aplicación, y diseñar el sistema de aire comprimido en consecuencia. Si, por el contrario, el sistema de compresión se diseña para una presión mucho más alta o más baja de lo necesario, puede suponer un aumento de los costes de funcionamiento, o más inversiones si debe adaptar y modificar el sistema para una presión más baja.
En este artículo explicaremos:
Compresores GA 75 VSD
Para evitar costes innecesarios y poner en peligro otros componentes del sistema de aire comprimido, se debería pensar en aplicar algún tipo de regulación de la presión. Esta es una forma de garantizar que su máquina proporcione el valor de presión de funcionamiento requerido.
Los sistemas mejor diseñados generarán la presión adecuada según lo requiera el proceso, manteniendo la presión sin mucha fluctuación.
Otros beneficios que pueden obtenerse añadiendo controles adecuados a los sistemas de compresores son:
El control de arranque/parada es uno de los esquemas de control más sencillos que existen. El controlador envía una señal al motor principal del compresor, haciéndole saber cuándo debe arrancar o parar en función de los puntos de presión preestablecidos.
Los controles de arranque/parada son los más básicos y se utilizan para compresores con ciclos de trabajo bajos de 25 CV o menores.
El control de carga/descarga también se conoce como control de velocidad constante porque el motor está constantemente en funcionamiento.
La carga/descarga es también el método de regulación de la presión más común. En lugar de apagar el motor cuando se alcanza la demanda de aire, el motor sigue funcionando, pero la válvula de entrada se cierra, lo que recircula el aire dentro del compresor y evita que el aire comprimido salga por la entrada.
El controlador del compresor detiene la unidad siempre que sea posible para reducir el consumo de energía y la reinicia automáticamente cuando la presión neta disminuye.
Si el periodo de descarga previsto es demasiado corto, la unidad se mantiene en funcionamiento para evitar periodos de parada demasiado cortos.
En un control de entrada modulante, la potencia de un compresor se varía para satisfacer los requisitos de caudal, normalmente utilizando una válvula de entrada.
En primer lugar, una válvula reguladora detecta la presión de descarga y envía una presión proporcional para accionar la válvula de entrada.
A medida que la presión aumenta en el compresor, la válvula de entrada comienza a cerrarse, o a estrangularse, lo que restringe el aire de entrada y disminuye la presión.
Esta situación acaba creando un vacío en el lado de entrada del compresor, mientras que su presión de salida permanece bastante constante.
El accionamiento de velocidad variable (VSD) es una regulación de flujo continuo que utiliza un variador especial para controlar la velocidad del motor mientras mantiene una presión de salida constante.
Utiliza el variador para un arranque suave mientras el motor sube de velocidad. Al variar la frecuencia o el voltaje del motor eléctrico, éste puede ser controlado por la demanda de aire.
Las fluctuaciones de presión se eliminan, ya que la presión se mantiene regulando la velocidad del motor a través del controlador del compresor, todo ello basado en la anticipación del aumento o disminución de la presión del sistema.
La regulación VSD puede suponer un ahorro sustancial al eliminar el funcionamiento sin carga del compresor.
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La tecnología VSD ajusta automáticamente la velocidad del motor del compresor a la demanda de aire comprimido en tiempo real. Este proceso suele suponer un gran ahorro de energía y dinero. En este libro electrónico descubrirá cómo un VSD puede resultarle útil.
